Dioses
Santo y yo jugábamos al dominó, mis fichas se cayeron y vi como Santo aprovechaba la ocasión para mirarlas y así tener ventaja. ¡No se hace! Cuando juegas con alguien hay que actuar como si tuvieras delante a una buena amiga con un bonito escote, hay que mirarle a los ojos y no hacer trampas. Pero no todo fueron juegos en nuestro viaje de seis días a L´Estartit (Girona). También hubo filosofía. ¿Quiénes creéis que son los verdaderos puros de corazón? Dijo Martín. ¡Toma ya! ¡Pásame el vino y tras varias copas te acabaré diciendo que te quiero más que nada mientras me tienes que llevar a la cama en brazos! De momento.. solo mi madre es pura de corazón, y el hámster del vecino, que da vueltas en su cinta seguramente pensando en cosas como estas o las obras de Platón. Y es que vivir con gente durante unos días da que pensar, a Lorenzo se le escapó sin querer, en un error de lenguaje, (o por efecto del vodka) mientras rezaba un padre nuestro (no se porqué), .. y perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos las tuyas... ¡Olé! ¡Con un par! Recriminándole sus errores, haber si se atreve a lanzar ahora un diluvio, y es que para todos aquellos que se preguntan porque Dios no da muestras de su existencia yo les respondo que si yo tuviera que dar tantas explicaciones como tendría que dar él yo tampoco aparecería. Y es que haber.... ¿porque le dio alas a los pingüinos sino pueden volar? ¿A cuento de que viene esa putada? No os preocupéis chicas, yo también hubiese abierto la caja de Pandora ¿Y es que a quien se le ocurre guardar esas cosas tan importantes en una caja? ¿No eres Dios? ¿No tienes nubes eléctricas destructoras echas con lava del volcán de Siracusa o algo así? En una caja... ¡es que son ganas de provocar!
¡Ah si! Girona. Con mis queridísimos cinco amigos italianos (Alessia, Clem, Santo, Lorenzo y Martín) y mis tres amigas danesas (Ulla, Lena y Katrine). (...¡En una caja es que hay que ser tonto!...) Lo pasamos muy bien, a pocos metros de la playa, a pocos metros de la fiesta, a pocos metros de la borrachera. Vivir con nueve personas es como ir a la carnicería, hay que pedir numero para ir al baño, pero nos apañábamos bien, los chicos tardábamos mas que las chicas, y es que la naturaleza es sabia, y con sentido del humor, a ellas les dio la belleza y a nosotros la necesidad de arreglarnos para estar bellos. (¡En una caja! Joder es que Zeus, que es tu colega no podía haberte regalado una mochila con candado o una riñonera, si fueras por el centro de Madrid te habrían robado hasta los calzoncillos) Lo pasamos genial. Bebimos reímos, bailamos la misma canción 652 veces, perdiendo el sentido del ritmo y de las palabras. Ayer cuando llegué soñé con ellos, y eso es bueno, significa que ya forman parte de mi, como mis uñas, solo que a ellos no les dejo crecer ni les utilizo para rascarme las orejas. Mi viaje personalmente estuvo marcado por las doce horas de ida en tren y las doce horas de vuelta. ¡Un día entero de mi vida metido en una maquina que va por raíles! Inexplicable, pero estuvo bien, conocí gente joven, bebimos, hasta en los trenes puede surgir un ligue o te pueden poner un pie en el cuello mientras duermen. Fue divertido.... Lo siento..., pero no puedo seguir, Vamos a ver, Dios, si te da por inventar los males (que ya tienes mala leche haber inventado la cometa), no los metas en una caja y menos los dejes cerca de Pandora que todo el mundo sabia en el barrio que era una cotilla que se pasaba el día con la oreja pegada a las puertas y hablando de los demás, que la llamaban radio Pandora, que luego me vienes con diluvios todo cabreao... me voy a dormir que me que me... ay!!! Seis días geniales, os echaré de menos, a vosotros que fuisteis verdaderos dioses robándome cada día, a cambio de sonrisas, todo mi corazón.
Chema
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