Mensaje sin Botella 28 (Parte II)

Mensaje con botella: Una mención especial

Al abrir la puerta un mensaje me entregó un paquete, lo abrí y allí estaba, una botella con un mensaje dentro, yo al principio me sorprendí un poco, no porque la botella contuviera un mensaje sino porque el cartero era un pingüino pero casualmente tenía una firma muy bonita. Al abrir el mensaje lo entendí todo. Lourdes ha llegado a Nueva York.... luego comencé a leer...

“Hola chicos! A falta de amigos al finalmente decidí y salí yo sola a dar una vuelta.

Preparo todo y salgo decidida hacia el metro camino Manhattan. Llega el metro, me subo y TODO EL MUNDO ME MIRA, sin exagerar, y yo me preguntaba ¿POR QUE? Tengo mocos? Llevo una gran mancha? Soy bizca??

Me siento y evidentemente agacho la cabeza. Poco a poco voy levantando los ojos y observando y descubro la razón...SOY LA UNICA BLANCA EN TODO EL VAGON y casi me atrevo a decir en casi todo el tren!! VAYA TELA CHAVALES!! cuantos matices sois capaces de imaginar entre el blanco y el negro?? 20?? Pues multiplicad x 10!!! Allí estaban todos esos mas los q no podemos imaginar.!! el siguiente matiz a mi, que estoy en el extremo blanco seria algo parecido a una gitana clara... había gente de tantas nacionalidades indefinidas entre el blanco y el negro (pasando por el amarillo, el sucio y el morado) q casi me mareo de tanto color!! Os juro q no estoy exagerando lo mas mínimo. Es q no lo estáis pensando: LA UNICA PERSONA DE RAZA BLANCA. Cuantos países con origen asiático existen?? Con cuantas razas diferentes se puede mezclar todos esos orígenes asiáticos?? Pues todas esas mezclas dentro de un mismo vagón Y YO ;-)

Al principio me he sentido un poco acojonada y “atacada” pero poco a poco les he ido cogiendo cariño y piensas lo diferentes q somos y como mola nuestro planeta q es capaz de darnos tanta diversidad en algo tan normal como la piel. Y he llegado a mi parada y en el trayecto no ha subido ningún hermano blanco. Luego por Manhattan hay de todo, claro, ya he visto hermanos!!

Para comer me he sentado en un banco de un parquecillo y me he comido mi sandwich. Las palomas han empezado a acercarse de manera sutil hasta darme cuenta de q había 6 demasiado cerca de mi. Era como q me estaban haciendo compañía, me miraban sutilmente y a mi me incomodaba un poco pero bueno, yo a mi bola. He abierto mi plátano y había un cacho un poco pasado y lo he partido y lanzado lejos... CRASO ERROR!! Las palomas se han ido acercando hasta acabar en un estampida, primero hacia el cacho de plátano y un segundo después hacia mi... hasta q me he visto LITERALMENTE rodeada de palomas asquerosas. He sentido como unos 100 ojos me observaban fijamente (y la cifra es aproximada, no exagerada). Me he tenido q levantar y acabar mi comida en otra parte porque notaba que iba a morir. Ojalá lo hubiera grabado para q lo vierais. Sigo comiendo mi plátano en un banco alejado del lugar de los hechos y me encuentro con un hilo de esos de plátano asquerosos. Que hago??Lo tiro al suelo?? Lo pongo en el banco?? Dios mio!! Odio esos hilillos!! No me queda mas opción q comérmelo para evitar un 2º ataque palomar!! Así son las palomas de NY!! Y claro, me ha dado por pensar que las palomas son el reflejo de la sociedad.

En Madrid si se pueden alejar lo hacen, siempre evitan cruzarse en el camino de un humano y nunca molestan. En Amsterdam son asesinas hijas deputa que tienes que parar y bajarte de la bici para q no aticen en la cabeza. Y siempre que pueden molestan y se meten en el camino de un humano. En NY quieren hacerse cómplices de ti y segundos después te quieren matar. ¿Somos así los humanos de estas ciudades o al menos existe alguna correlación causal entre nuestro modo de vida y el comportamiento de las palomas?? Puede ser que en las ciudades donde las palomas buscan tu compañía es donde la gente esta mas sola?? O donde hay mayor número de calvos?? Who knows!!”

Cerré el papel y me lo guardé en un bolsillo... cogí una chaqueta, salí por la puerta y crucé dos calles, subí a un segundo piso, cruce un salón donde una secretaria me daba los buenos días y me hacía esperar mientras leía una revista de caza y pesca, entré en la consulta y me tumbé en el diván. “No estamos solos” dije en voz baja.... a las dos horas de estar tumbado esperando una reacción ante esa frase me di cuenta que mi psicólogo no estaba y que en verdad ese día libraba ... ¡Grande Lourdes!

Chema
06/10/08