Mensaje sin Botella 18

Ángeles y borracheras

No voy a poner excusas, ayer no me dio tiempo a mandar un mensaje sin botella, porque la botella me la bebí... salí a emborracharme. Y es que ayer durante el día tampoco hice mucho, salvo hablar con Sarita por el messenger y esculpir un ángel de hielo. ¿Alguien me puede decir que es un ángel? Ok es un niño, pero o Dios es un poco pederasta o pasarme la eternidad rodeado de querubines que no tienen claro su sexo no es lo que mas me convence. Yo me imagino a José explicándole a Jesús lo de la cigüeña y la semillita.

- Pues a ver ... Jesús... El hombre siembra una semillita en la mujer, y luego 9 meses después, en la barriga crece la personita...

- Pues a mi me ha dicho mamá que no es tuyo y es de una paloma,.. .

- A ver Jesús, alma de cántaro, no estás prestando atención, escúchame... es con lo que tiene el papa entre las piernas que se mete dentro de la mamá....

- ¡Pues entonces porque llaman virgen a mamá?

- ¡VALE! ¡Eres hijo del vecino!, ¡eres el puto hijo del vecino!! ¡¡ya lo he dicho!!

Y ya ni te cuento cuando lo bañaban en la bañerita de hierro (porque si en casa del herrero cuchillo de palo pues en casa del carpintero al revés)

- ¿Y que es esto papa, que no tienen las niñas?

- El pito.

- ¿Y porque los Ángeles no tienen?

Es que ser padre en el siglo 0 d.c. era muy difícil.

Porque yo me imagino a la gente contenta cuando nació Jesús... joder ya era hora que no sabíamos cuando fechar las guerras del Peloponeso... ahora ya sabemos... ¡en el siglo VII antes de tú! Antes, en esa época se decía en el cole, ¿cuando fueron las guerras del Peloponeso Juanito? Hace mucho. Muy bien! aprobado. Porque es que no se podía fechar. Pero con Jesús todo cambió y gracias a él yo puedo hoy salir a la calle sabiendo que el fanatismo religioso ha convertido a las hijas de los católicos en autenticas lobas de discoteca.

Y hoy os cuento la noche. ¡Que indignación! Es que no vuelvo a echarme amigas guapas. Era la despedida de Ali, y más o menos de Sara que no vive aquí, está de ocupa. Yo, que llegué con mi maleta llena de ilusiones, con mi Hola que tal? Cuanto tiempo? ... y había que pedir vez para hablar con ellas. Los chinos que venden cervezas vendían además tickets con un numero mucho mas bajo que el mío para poder simplemente preguntarles que tal les iba. Yo tenia el 29. A mi eso de tratar de mantener una conversación mientras dos chicos más intentan ganar la posición clavándome los codos no me mola, y ni pitaron penalti ni nada. Para tratar de llegar a ellas había que atravesar una muralla de hombres, que me sentía como en un partido de Fútbol americano, al principio era divertido, una vez que me adelante a uno, me di la vuelta y le grité Toma!! Toma!! Jodeteeeeeee y luego tras tirar la pelota al publico ya hablé con mis amigas, 5 minutos porque no te dejaban más. Había un notario con un cronometro al lado controlando el tiempo. No vuelvo a echarme a amigas guapas. Paso. Sobre todo por el bien de mi salud pues terminé bebiéndome el alcohol que los chicos se olvidaban mientras trataban de convencerlas para llevárselas a la cama. ¡Vaya pedo! Que resaca... no vuelvo a beber... uy me voy corriendo que he quedado con Molina en un botellón.

Chema

13/09/08